La Institución Naturista “Pro Vida” de la calle Zenea 57.

La Institución Naturista “Pro Vida” de la calle Zenea 57.

El tejido de sociabilidades y experiencias asociativas que se han perdido en Cuba es inmenso y más grande aun es la desmemoria sobre los esfuerzos de creación colectiva, que se gestaron en disimiles localidades de la Isla, para buscar alternativas practicas a los obstáculos inmensos que generaron las practicas caudillistas, verticalistas y autoritarias, casi institucionalizadas desde nuestros orígenes republicanos en 1902, hasta hoy.

Como parte de ese tejido asociativo olvidado en medio del vendaval autoritario y megalómano que se ha instalado entre nosotros, se encuentra la Institución Naturista “Pro Vida”, con una existencia documentada de 40 años, entre 1917-1957. Esta institución fue fundada por Adrian del Valle, un conocido publicista y bibliotecario anarquista de origen catalán, hoy olvidado, del cual el novelista Carlos Loveira fue uno de sus más fervientes admiradores, y su ultimo director fue el doctor Tirso Urdanivia Alcalá, desaparecido en 1957 junto a su hijo, por la acción funesta de la lacra policial batistiana.

El tejido de sociabilidades y experiencias asociativas que se han perdido en Cuba es inmenso y más grande aun es la desmemoria sobre los esfuerzos de creación colectiva, que se gestaron en disimiles localidades de la Isla, para buscar alternativas practicas a los obstáculos inmensos que generaron las practicas caudillistas, verticalistas y autoritarias, casi institucionalizadas desde nuestros orígenes republicanos en 1902, hasta hoy.

Como parte de ese tejido asociativo olvidado en medio del vendaval autoritario y megalómano que se ha instalado entre nosotros, se encuentra la Institución Naturista “Pro Vida”, con una existencia documentada de 40 años, entre 1917-1957. Esta institución fue fundada por Adrian del Valle, un conocido publicista y bibliotecario anarquista de origen catalán, hoy olvidado, del cual el novelista Carlos Loveira fue uno de sus más fervientes admiradores, y su ultimo director fue el doctor Tirso Urdanivia Alcalá, desaparecido en 1957 junto a su hijo, por la acción funesta de la lacra policial batistiana.

El edificio de Zenea 57 fue el local social de esta asociación y la revista Pro Vida fue su medio de expresión pública durante más de 20 años. A través de las páginas de esta revista se puede conocer la amplia y diversa labor desplegada por esta institución. El proyecto Zenea 57 busca recuperar la memoria de este lugar y establecer un puente de comunicación con algunos de los vecinos que hoy habitan este lugar convertido en una cuartería colectiva.   

El edificio de Zenea 57 fue el local social de esta asociación y la revista Pro Vida fue su medio de expresión pública durante más de 20 años. A través de las páginas de esta revista se puede conocer la amplia y diversa labor desplegada por esta institución. El proyecto Zenea 57 busca recuperar la memoria de este lugar y establecer un puente de comunicación con algunos de los vecinos que hoy habitan este lugar convertido en una cuartería colectiva.